Había una vez tres cerditos que vivían en el bosque. Los tres cerditos tenían un enemigo llamado lobo feroz y se construyeron su propia casa. El cerdito pequeño una casa de cristal, el mediano una casa de piedra y el grande una casa de hierro.
El lobo fue a destrozarles las casas, primero fue a por la del pequeño. El lobo cogió un montón de piedras, se las tiró a su casa y le rompió todos los cristales. Luego se fue a por el mediano que tenía una casa de piedra y era imposible destruirla pero el lobo sabía cómo destruirla, haciendo un derrumbamiento con un palo y el cerdo salió por el túnel de debajo tierra. Salió a la superfície y los dos cerditos se fueron para casa del cerdito grande. El lobo fue directamente para la casa del grande y era imposible de derrumbarlo pero el lobo puso unas cuantas dinamitas por detrás
de la casa. La activó y la dinamita explotó. La casa se derrumbó y el lobo se quedó atrapado por el derrumbe. Los tres cerditos se salvaron.
El lobo fue a destrozarles las casas, primero fue a por la del pequeño. El lobo cogió un montón de piedras, se las tiró a su casa y le rompió todos los cristales. Luego se fue a por el mediano que tenía una casa de piedra y era imposible destruirla pero el lobo sabía cómo destruirla, haciendo un derrumbamiento con un palo y el cerdo salió por el túnel de debajo tierra. Salió a la superfície y los dos cerditos se fueron para casa del cerdito grande. El lobo fue directamente para la casa del grande y era imposible de derrumbarlo pero el lobo puso unas cuantas dinamitas por detrás
de la casa. La activó y la dinamita explotó. La casa se derrumbó y el lobo se quedó atrapado por el derrumbe. Los tres cerditos se salvaron.
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