Un día con mis amigos estábamos paseando cerca de mi casa, nos quedamos hasta que el día se oscureció, todos estabamos cansados y teníamos ganas de irnos a casa, hacía mucho frío y los búhos estaban con los ojos abiertos haciendo su sonido aterrador y solitaro, a medida que nos íbamos acercando a casa había más nieva y más oscuridad, teníamos miedo pero nadie decía nada, hasta que se escucha un ruido muy fuerte y todos echamos a correr y nos metimos en una cabaña abandonada, empezo a llover con una gran cantidad y decidimos quedarnos esa noche en esa cabaña apestosa. Al dia siguente nos levantamos muy temprano y hacia un tiempo nublado medio soleado, todos obserbamos todo lo que había alrededor de la cabaña y descubrimos que era un pueblo dejado por una antigua tribu del los megamayas, aquella tribu no le importaba su higiene por lo que echaba esa peste tan desagradable de la cabaña, después de explorar el pueblo convocamos una reunión para decidir los turnos de cada vigilante. Estuvimos restaurando todas las chozas del pueblo y ahora cada día nos reunimos allí.
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